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La economía solidaria no es una utopía inalcanzable. Para demostrarlo, en Aragón han aparecido varias iniciativas que apuestan por una forma alternativa de hacer comercio.
Uno de los ejemplos más consolidados son las muestras de productos agroecológicos que tienen lugar en la plaza José Sinués. En este mercado, los intermediarios dejan de tener el poder en la alimentación y son los productores los que acercan sus productos de alimentación artesana y de la huerta hasta la puerta de casa. El modelo está tan consolidado que cada edición es un éxito y todos los productores agotan existencias.
Otra de las alternativas al consumo habitual son los mercadillos de Calles Vivas que nacidos en el barrio de la Magdalena se presentan como un apoyo claro al comercio de proximidad como medio de regeneración social y urbanística de las zonas degradadas. Además, esta es una forma de acceder a productos reciclados, de segunda mano o a un bajo precio destinados a un consumo responsable.
La última de las opciones presentadas en las jornadas fue la segunda edición de laferia del Mercado Social en Aragón. En ella, los curiosos pudieron acceder a puestos informativos y de venta de productos de economía solidaria. Impulsado por la Red de Economía Alternativa y Solidaria de Aragón, pretende apostar por los procesos participativos y aportar propuestas concretas para la puesta en marcha de las alternativas sociales.
Uno de los ejemplos más consolidados son las muestras de productos agroecológicos que tienen lugar en la plaza José Sinués. En este mercado, los intermediarios dejan de tener el poder en la alimentación y son los productores los que acercan sus productos de alimentación artesana y de la huerta hasta la puerta de casa. El modelo está tan consolidado que cada edición es un éxito y todos los productores agotan existencias.
Otra de las alternativas al consumo habitual son los mercadillos de Calles Vivas que nacidos en el barrio de la Magdalena se presentan como un apoyo claro al comercio de proximidad como medio de regeneración social y urbanística de las zonas degradadas. Además, esta es una forma de acceder a productos reciclados, de segunda mano o a un bajo precio destinados a un consumo responsable.
La última de las opciones presentadas en las jornadas fue la segunda edición de laferia del Mercado Social en Aragón. En ella, los curiosos pudieron acceder a puestos informativos y de venta de productos de economía solidaria. Impulsado por la Red de Economía Alternativa y Solidaria de Aragón, pretende apostar por los procesos participativos y aportar propuestas concretas para la puesta en marcha de las alternativas sociales.
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