domingo, 26 de abril de 2009

LAS HERIDAS QUE MÁS DUELEN


Solo las listas de espera y las largas demoras empañan la confianza de los aragoneses en los servicios sanitarios. Y eso que la opinión sobre el sistema goza de buena salud, a tenor de los datos delBarómetro sanitario 2008, que mide el grado de satisfacción de los ciudadanos. Los aragoneses perciben los problemas del sistema, pero a pesar de ellos, le dan un bien alto. Eso sí, le pedirían algunos cambios.

Casi la mitad de los aragoneses asegura que el sistema sanitario funciona bien, pero necesita mejoras. El 23% dice que el sistema precisa cambios fundamentales y solo el 3% cree que está tan mal que se requiere rehacerlo. Los aragoneses le dan al sistema una nota de 6,68, por encima de la media en España. Sin embargo, seis de cada diez creen que la atención sanitaria no es igual dependiendo de si se reside en un núcleo urbano o rural.

Esta nota se refleja también en la elección por parte de los aragoneses de un servicio sanitario público o privado. En el barómetro se proponen varias premisas: la tecnología y los medios de los que dispone, la capacitación de los médicos y enfermeras, la información que recibe sobre su problema de salud y el trato personal. En todas estas variables el usuario aragonés preferiría, si pudiera elegir, ser tratado en un centro público. Solo en la variable de la rapidez con la que le atienden y el confort de las instalaciones los aragoneses se decantarían por acudir a un centro privado (en el 58% en el primer caso y el 44% en el segundo).

De hecho, el 65% de los aragoneses asegura que optaría por acudir a un centro público si un miembro de su familia tuviera una enfermedad grave. La media del conjunto nacional es, sin embargo, hasta diez puntos más baja y solo el 55% apostaría por la sanidad pública. A pesar de ello, una cuarta parte de los aragoneses asegura que ha pensado poner una queja o reclamación por el funcionamiento de los servicios sanitarios públicos. Pero, de ellos, solo el 27% la puso realmente.

El nivel de satisfacción mayor está en Atención Primaria. El 88% de los encuestados cree que la atención recibida en las consultas del médico de cabecera ha sido buena o muy buena. Al 75% de los ciudadanos le dan cita con el médico del centro de salud para ir en el mismo día siempre o casi siempre. Y la demora se prolongo durante casi tres días la última vez que pidió cita. A pesar de ello, el 81% de los usuarios recomendaría a sus amigos y familiares su centro de salud, el porcentaje más alto de toda España igualado por Navarra.

El barómetro propone a los usuarios una quincena de aspectos para valorar las consultas de medicina general y pediatría, como cercanía, horario de atención, trato del personal, la información recibida... Las notas más bajas (del 1 al 10) dan un aprobado justo a algunos aspectos. Así, los aragoneses dan un 5,74 al tiempo de espera hasta entrar en consulta y un 5,21 al tiempo que se tarda en hacer las pruebas diagnósticas.

Respecto a los servicios de urgencias, el 31% de los encuestados acudió a un centro de Primaria, el 47% a un hospital y casi el 10% a ambos recursos sanitarios. El 75% de los aragoneses que acudió a un hospital lo hizo por decisión propia y el principal motivo porque considera que en las urgencias del hospital hay más medios. El 35% dijo que fue porque no coincidía con el horario del médico de cabecera.

El 83% de los usuarios asegura que le atendieron con mucha o bastante rapidez, un porcentaje muy superior al de otras comunidades, que ronda un 65%. Además, casi el 84% dijo haber sido atendido bien o muy bien.

En cuanto a la Atención Especializada, el 85% de los usuarios declara haber sido atendido bien o muy bien. Las variables que peores notas han sacado son el tiempo que tarda el médico en verle desde que pide cita (un 5,03) y el tiempo que se tarda con las pruebas diagnósticas, que suspende con un 4,94.

Respecto a los aragoneses fueron ingresados, la opinión positiva es abrumadora. El 100% de los encuestados aseguró que la atención recibida había sido buena y muy buena. Así, las estancias hospitalarias sacan mucha mejor nota que en España, donde el 10% de los ingresados dijo que regular.



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