El drama hipotecario en España, lejos de remitir, queda ya cronificado, como una pandemia invasora al ritmo de la crisis, el desempleo y el aumento de la morosidad. A pesar de los esfuerzos de los consumidores, que son el grupo deudor con menos tasa de mora, el importe de créditos dudosos ya está en cerca de 30.000 millones, el doble que hace tres años. Y la acumulación de deudas impagadas continúa teniendo efectos sobre los juzgados, que siguen sin parar de plantear ejecuciones.
Las cifras que muestra el CGPJ correspondientes al tercer trimestre de 2013, el pasado verano, muestran una muy leve caída de la cifra de ejecuciones hipotecarias respecto al mismo periodo de 2012. Entonces hubo 19.200, y este año algo más de 17.000. Una caída del 10% que, en principio, se corresponde con un cierto relajo del ritmo de acciones judiciales relacionadas con problemas hipotecarios. Ciertamente, 2012 fue un año absolutamente demoledor, que no podía repetirse.
El problema es que a pesar de la lucha colectiva emprendida por ADICAE, que está logrando compromisos entre los juristas en favor de los consumidores, y con los parches legislativos aprobados por Gobierno y Parlamento, la cifra de ejecuciones no arregla lo que pasó en 2011, que fue un año muy malo también. De hecho, en verano de 2013 se registraron un 15% más de ejecuciones de las que hubo en el mismo periodo de 2011.
ADICAE sigue advirtiendo de que el drama hipotecario, lejos de solucionarse, está enquistado en España, con sus consecuencias absolutamente dramáticas
2013, en realidad, apunta a ser peor año que ese 2011. En los nueve primeros meses de 2011 se contabilizaron 57.103 ejecuciones hipotecarias, y este año, de enero a septiembre, la cifra es ya de 58.604, un 2,6% más. Si a pesar de todo las estadísticas siguen sin mejorar, los consumidores tendremos que continuar la presión colectiva, institucional, social y jurídica, para que se ponga en marcha una regulación que de verdad proteja los intereses de los deudores.
Más lanzamientos
Porque, más allá de las ejecuciones, la evolución de los lanzamientos, el paso final que despoja al deudor de su inmueble, es todavía más negativa. El tercer trimestre de 2013 ha batido un récord, según la estadística del CGPJ, récord absoluto de cualquier verano desde que comenzó la crisis. De julio a septiembre de este año se registraron 14.076 lanzamientos, más que cualquier otro verano desde 2008. Casi el doble que en 2009, casi tres veces más que en 2008.
Ello deja la cifra de lanzamientos en lo que va de 2013 en un total de 47.340, frente a los 52.045 que se produjeron en el mismo periodo de ese 2012 maldito. Entonces había un lanzamiento cada siete minutos. Ahora es cada ocho minutos; no parece que el drama se frene... Más aún, en el mismo periodo de 2011 la cifra de lanzamientos se quedó en 45.810, con lo cual este 2013 será también peor que 2011. ADICAE sigue advirtiendo de que el drama hipotecario, lejos de solucionarse, está enquistado en España, con sus consecuencias absolutamente lamentables.
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